martes, 2 de diciembre de 2008

Command and Conquer - A fondo


Resulta muy difícil explicar qué es Command & Conquer y todo lo que ha significado dentro del mundo, ya no sólo de los juegos de estrategia, sino de las diferentes categorías como arcade, 3D, rol, plataformas, simuladores,...

Se trata del hermano mediano de Dune 2, es decir, del pionero en cuanto a la estrategia en tiempo real, más allá de los primeros Wargames, cuya finalidad era copiar con la máxima fidelidad los juegos de tablero. De Dune 2 hablaremos en otro momento, cuando nos refiramos a los títulos basados en un futuro más o menos lejano o ciencia ficción.

Pero de Command & Conquer hay que resaltar que junto con Warcraft es el pilar en el que se sustenta el desarrollo de todos los juegos de estrategia bélica en tiempo real que hoy jugamos. Son más o menos clónicos de uno u otro con algunas novedades marcadas por la evolución de los ordenadores (gráficos 3D, sonido) o simplemente un compendio de ideas novedosas que han surgido a lo largo de los casi cinco años de aplicación del tiempo real.

Hoy en día pocas son las personas que disponiendo de ordenador no han jugado alguna partida a Command & Conquer, Quake o Tomb Raider, en cualquiera de sus versiones.

Además, en el caso que estamos tratando, hablamos del juego que más unidades ha vendido en el mercado, ya sea bajo el titulo Command & Conquer, Command & Conquer: Cover Operations, Command & Conquer: Red Alert, Command & Conquer: Red Alert-Counterstrike, Command & Conquer: Red Alert- Aftermath, Command & Conquer: Sole Survivor, Command & Conquer: Tiberian Sun, Command & Conquer: Generals, Command & Conquer: Red Alert II...

El planteamiento del juego en sí proviene de Dune 2 con sus edificios, a partir de los cuales obtener unidades, cuantas más mejor, y más potentes cuanto más avances a través de las pantallas.

El mundo en un solo click

Pero más importante que el desarrollo, es la facilidad de manejo, que permite dejar de lado el manual de instrucciones y sólo utilizarlo para conocer las cualidades de las diferentes unidades o solventar algún problema de instalación. Solamente con el ratón controlarás a todas tus fuerzas y las podrás enviar al peor de los combates, escoltar a tus recolectores de recursos, situarlas estratégicamente defendiendo un paso o tu ciudad, o colocar tus edificios y construcciones en el punto que desees y te permita el programa.

Vende tus construcciones, repáralas y desarrolla tu potencial al máximo, hasta conseguir el arma definitiva que en grupos numerosos arrasará al contrario.

Esta es quizá una de las diferencias más destacadas respecto a Warcraft; tus unidades nunca variarán en mejoras, siempre tendrás los mismos pros y contras, no necesitarás potenciar los edificios hasta límites insospechados, fabricarás tus demandas con un solo click y el único inconveniente del tiberio y la energía.

Pero vamos al grano. En Command & Conquer podrás elegir dos ejércitos o los soviéticos (NOD) o los aliados (GDI), que tampoco tienen por que ser los buenos o los malos, ya que tarde o temprano terminarás jugando con ambos. Utiliza gráficos en un 3D más limitado que el que hoy conocemos, pero no ausente de vistosidad. Paisajes que nos llevarán desde el cálido desierto hasta la más fría nieve, pasando por verdes bosques con acantilados, árboles o rocas, sin olvidar el mar y los ríos. En cuanto a los gráficos también destacan los vídeos entre pantallas y preliminar para ambientar el juego. El pequeño defecto que le veo es que el tamaño de las unidades es diminuto comparado con otros títulos y más aún si lo ejecutas en el modo para Windows 95. Las comparaciones son odiosas, pero si estás acostumbrado a jugar Starcraft, la sorpresa puede ser no muy agradable para ti.

Y respecto al sonido, la música no se te olvidará por que te aseguramos horas delante del ordenador para poder concluir el juego. De todas formas una de las mayores limitaciones está en los samples de sonido de las unidades. No son muchos y no esperes contestaciones tan variadas como en Warcraft 2 o que cuando selecciones un edificio se escuche su sonido particular. Con todo las explosiones o detonaciones de los proyectiles o tanques no te dejarán tiempo para disfrutar de mucho más. La infantería también dispara y siempre sabrás si han eliminado a alguna de tus unidades.

Diferentes tipos de misiones

Aunque siempre estarás más pendiente de acabar de una vez con todas con el enemigo, podrás hacerlo partiendo con una pequeña cantidad de dinero a partir de la cual deberás desarrollar al máximo tu base, o con ésta ya construida potenciar tus tropas, o por el contrario con un pequeño ejército y sin la posibilidad de construir. En otros casos te encontrarás con unidades especializadas como ingenieros o comandos para resolver la misión en cuestión.

Para todo ello, lo fundamental será la recolección de recursos representados por campos de tiberio.

En la parte derecha de la pantalla podrás observar dos barras. Una de ellas te indica las construcciones que puedes realizar y la otra las unidades. Según vayas fabricándolas, un indicador sonoro te advertirá de la posibilidad de nuevas opciones en cada caso.

El taller de construcción te ofrecerá el desarrollo de una planta de energía ya que esta es la base de funcionamiento de las edificaciones; cuantas más hagas, más energía necesitarás. De todas formas este problema se puede considerar como banal comparado con la recogida de tiberio. Ya tienes tu taller de construcción y tu planta de energía, es el momento de ir a por la refinería. Cuando la tengas, de ella saldrá un recolector de tiberio que es la fuente fundamental para conseguir tus recursos. A partir de este momento llega la gran decisión: teniendo en cuenta que hasta que no esté acabado el edificio en construcción no podrás realizar otra cosa... decide. Aquí empieza ya la estrategia. Hacer otra refinería para conseguir recursos más rápido, construir un cuartel para obtener infantería, una fábrica de armamento para tus unidades motorizadas, defensa pasiva como torretas o un radar para saber en cada momento si se acercan tus enemigos por algún lado.

Respecto a esto hay que comentar que partes de un terreno con niebla cerrada de guerra, es decir, todo está ennegrecido hasta que pases por ahí.

No hay mejor defensa que quedarse esperando

Sí te has decido por un cuartel tendrás que pensar si a los soldados los colocas en posiciones de defensa de tu futuro campamento, si abren plano para descubrir más recursos, o si simplemente lo abren para tener controladas estas zonas a través del radar y que tus enemigos no se acerquen. De todas formas no seas suicida por que a pesar de que tú acabas de empezar, el ordenador ya tendrá a su disposición un importante número de tropas que acabarán con todas tus expectativas. Tú tranquilo fortifica tu base y continúa construyendo instalaciones como helipuertos para los ataques de helicópteros, hangares de reparación, trincheras o muros. Cuando los acabes, es el momento de elegir con qué tropas llevar a cabo la batalla final.

Para ello contarás con infantería ligera, soldados de ametralladora que también saldrán de los edificios una vez destruidos o vendidos, granaderos que lanzan sus artefactos salvando barreras, artilleros o bazookas muy oportunos para abatir unidades aéreas, lanzallamas cuya efectividad mayor se hará patente cuanto más cerca estén del enemigo y por último los ingenieros cuya finalidad es capturar edificios enemigos (dependiendo del cual te aportará la posibilidad de realizar nuevas unidades). La infantería es prácticamente igual para ambos bandos, no obstante las cosas varían respecto a los vehículos.

Las motos de asalto (NOD), buggy del desierto (NOD) o avispas (GDI) son unidades rápidas y con poco armamento, destinadas fundamentalmente para abrir plano o escoltar otros vehículos. Son más operativas contra la infantería que frente a las unidades mecanizadas.

Luego dispondrás de tanques como el ligero de los NOD o el Abrams del GDI, el segundo más potente que el primero pero que poco podrá hacer frente al gran Mamut GDI. Contarás con armamento de gran alcance como la artillería transportable o el MLRS. Añade a todo esto tanques incendiarios que reducen a la infantería a cenizas o tanques silenciosos que se vuelven invisibles y sólo se dejan ver cuando te están atacando. Todos ellos tienen la virtud añadida de poder aplastar a las tropas de a pie que se convierten en charcos de sangre a su paso. La guerra por mar se reduce a lanchas cañoneras solamente disponibles para el mando aliado y sobre las que no tendrás ningún control generalmente. Ya en lo que respecta al espacio aéreo deberás de decidir entre aviones de combate mas parecidos a un helicóptero que otra cosa o aviones de apoyo a tierra. Es posible que encuentres más unidades como comandos o helicópteros de transporte, pero difícilmente podrás construirlas.

También multijugador

Al igual que otros títulos de esta época, y es que hablamos de 1995, el modo multijugador se centra en partidas a través de modem, cable de red o directo, con la posibilidad de hasta cuatro jugadores. La verdad es que esta opción no tuvo un gran éxito. Seguramente por que cuando se empezó a poner de moda, ya había salido al mercado Red Alert que ofrecía más posibilidades. Quizá también por ello, pronto bajó sustancialmente su precio en el mercado hasta algo menos de 2.000 pesetas. Un precio increíble si tenemos en cuenta su gran calidad y que está compuesto por dos CD ROM, uno por bando. Sus ventas aumentaron y sirvieron de rampa de lanzamiento para Red Alert que básicamente es más de lo mismo aunque con novedades importantes.

Una última mención para su inteligencia artificial, bastante buena en líneas generales, pero con lo clásicos problemas de atoramientos de unidades en los momentos y lugares menos oportunos. Capítulo aparte para los recolectores de tiberio que parece que tienen el don de ir a recoger al punto más alejado de tu campamento, o los tanques, que al verse rodeados de enemigos no saben a quién disparar.

De la interfaz no hay mucho que decir, sólo que es la más simple que conocemos. Con el ratón podrás recuadrar un número de unidades determinado, desde una hasta infinito y una vez seleccionadas enviarlas a por un enemigo o desplazarlas. En este juego no obtendrás una descripción detallada de la unidad en pantalla y sólo sabrás como está seleccionándola con el ratón y observando su barra de estado. Si esta verde, no hay problema, si es amarilla empieza a alarmarte y si está roja lo tienes bastante negro. Los edificios también disponen de su barra de estado. Si están tocados elige el botón en el cuadro de la derecha con forma de llave inglesa y se repararán, siempre y cuando tengas dinero. Si por el contrario hay alguno que ya no te sirva, véndelo: conseguirás dinero y alguna que otra unidad.

Si lo tienes ya todo medianamente claro, al ataque. Te pasarás varios días delante del ordenador, pero no te preocupes que cuando acabes nuevas misiones te estarán esperando con Covert Operations.

COMMAND AND CONQUER

TRUCOS

0 comentarios: